* Se pronuncian líderes juaristas contra el “pase automático” de grado escolar,
contra la ausencia y falta de maestros, y sobre los planes educativos
incompatibles en cada nivel
Fotos:
Flor Castillo
SEPTIMO
DIA, TIJUANA.- En su habitual reunión semanal, la Avanzada Liberal y
Líderes Juaristas se pronunciaron ahora contra el deficiente sistema educativo
del país, y que en Baja California se padece horrores, pues “no puede ser que
los chamacos pasen automáticamente de grado escolar”, “tampoco es aceptable
tantas ausencias de maestros y que además faltan profesores, siendo que año con
año se gradúan muchos de las escuelas normalistas”.
En pocas palabras,
lamentaron que la educación que se imparte en México está por los suelos, y sugirieron
además que se establezca un patrón único de planes de estudio y desarrollo
pedagógico, porque resulta que en cada escuela, sobre todo pasando de una
privada a una de carácter pública, los planes educativos son incompatibles, en
cada nivel.
Los integrantes de la
agrupación de Avanzada Liberal y Líderes Juaristas ponderaron la iniciativa de
ley o de decreto que contempla castigar con cárcel a quienes cobren cuotas
escolares, pero lamentaron que todavía no se encuentre decretada esa medida y
entre en vigor.
De acuerdo a las
últimas reformas educativas, los estudiantes pasan automáticamente de grado, a
pesar de que reprueben, simplemente pidiéndoles que en el transcurso del
siguiente ciclo escolar y nuevo grado escolar, se vayan regularizando con las materias
que adeuden del grado escolar anterior.
Antes, el alumno que
reprobaba, quedaba en el mismo ciclo escolar cuantas veces hayan reprobado, sin
importar si cumplía los 15 años de edad estando todavía en tercero de primaria;
se trata de calidad educativa, no de maquilar estudiantes.
Por otra parte, se
registran muchas ausencias de maestros que se pasan más “en la grilla” que en
las aulas, y estas deben ser sancionadas, además de suplir esas ausencias, para
que los alumnos no pierdan clases; pero resulta también que presuntamente
faltan maestros, y es que los egresados de las escuelas normalistas ahora
tienen que pasar un exámen para saber si se les aprueba la plaza.
Se supone que si
alguien se graduó de una licenciatura en educación, ya está capacitado para dar
clases y ocupar una plaza dentro del magisterio; los exámenes para acreditar
las plazas, en todo caso, debería aplicarse en el futuro, cuando salgan los
estudiantes “maquilados”.
Respecto de los
planes educativos, observaron que un estudiante que cursa, digamos, el segundo
grado de secundaria en una escuela pública y para el tercer grado quiere entrar
a una escuela privada, o viceversa, les piden regresar al primer grado, porque
los planes y programas de estudio no son los mismos; lo mismo sucede en los
niveles de primaria y de preparatoria o bachillerato, sobre todo en esos
últimos, y ya no se diga la completa incompatibilidad de materias entre
escuelas privadas de nivel superior o universitarias.
Hasta en las escuelas
primarias y secundarias de un estado a otro de la República hay
incompatibilidades.
Por lo anterior, el
pronunciamiento de los líderes juaristas fue que la Secretaría de Educación
Federal establezca un patrón único de enseñanza y métodos pedagógicos, con
planes y programas de estudio similares o compatibles, sean escuelas públicas o
privadas.
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